El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, tras una primera evaluación del alcance de la prestación y haber mantenido reuniones con entidades del tercer sector, ha propuesto una serie de medidas, a través del RDL 3/2021, para mejorar el acceso al Ingreso Mínimo Vital.
Datos diciembre 2020: casi 160.000 hogares en los que viven más de 460.000 personas (de ellas, el 47% eran menores de edad)
1.- Se suprime el límite de titulares por vivienda para personas en situación de sinhogarismo o que residen en centros residenciales de carácter no permanente, además de reconocer la realidad de personas en situación de vulnerabilidad que se agrupan en una misma vivienda.
2.- Se introduce el concepto de unidad de convivencia independiente (familia nuclear) en casos de mujeres violencia de género, divorcio o separación, así como afectados por desahucio o inhabitabilidad para permitir el acceso a la prestación. Los dos últimos con límite temporal (la consideración expirará al tercer año) para que una situación sobrevenida no influya en el derecho a IMV.
3.- Se posibilita que, en otras situaciones de convivencia complejas, la acreditación de la unidad de convivencia pueda ser certificada por los servicios sociales, entidades colaboradoras del IMV y el tercer sector social subsidiaria y transitoriamente.
4.- Podrán acreditar situaciones como la de personas en situación de riesgo de exclusión social para las personas que vivan juntas sin vínculos o de quienes se encuentren empadronados en “domicilio ficticio” (personas sin hogar).
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